Mirian Rossio necesita dos empleos para subsistir. Trabaja los siete días de la semana como auxiliar de ayuda domiciliaria. Asegura que la mayoría de compañeras en su sector están en su misma situación.

Relata que tiene un trabajo de lunes a viernes de 30 horas y el salario no llega a 800 euros. Durante los fines de semana trabaja otras doce horas, a turno partido, y así consigue otros 400 euros. "En mi sector hay familias monoparentales y tienen que hacerse cargo de todos, como yo", asegura la mujer.

"Tengo a mi madre a mi cargo y no puedo subsistir con un solo trabajo. Nuestro sector está muy precarizado. Es un trabajo muy bonito, pero muy mal pagado", lamenta Mirian, como puede observarse en el vídeo situado sobre estas líneas.