El libro 'King Corp' indaga sobre la figura del rey Juan Carlos I y su vida no oficial. En uno de los capítulos se habla de tres cuadros que desaparecieron de las paredes del Palacio Real en 1989: fueron misteriosamente robados sin que hubiese ningún rastro, sin testigos, sin que saltasen las alarmas en un edificio sometido a grandes medidas de seguridad.

La desaparición sigue siendo a día de hoy todo un misterio. La policía estuvo investigándolo y el caso sigue abierto, porque no se han encontrado culpables para el robo. De hecho, es la investigación sobre un robo de arte más longeva de la historia de la policía de España.

Pero el libro desvela que Sabino Fernández, el que fuera mano derecha del emérito, contó a un amigo antes de morir que habría visto esos cuadros en casa de una amante del rey. El periodista José María Olmo, coautor del libro, explica en laSexta Xplica que han contactado con esta presunta amante y ella no lo ha desmentido y ha preferido no hacer comentarios sobre el tema.

Por otro lado, el periodista apunta que se trata de unas obras tan reconocidas que "es prácticamente imposible colocarlas en el mercado negro o subastarlas".