Gonzalo Bernardos puso el ejemplo de Barcelona para demostrar cómo ha caído la vivienda social: "En 2018 el número de obras fue 1.000 y en 2019 500. "En Barcelona nadie quería construir por debajo de los 600 metros, ahora todo el mundo quiere construir porque no tiene que hacer este 30%". Así, advirtió de que se trata de algo "muy peligroso porque cuanto menos promoción se haga en un mercado que ya se está calentando, va a generar más fácil subidas de precios y burbujas".
"Si en Barcelona ha fallado, y tenemos los datos, en toda España volverá a fallar. El sistema siempre es el mismo. Hay que hacer mucha vivienda", afirmó, al tiempo que pidió a los políticos que digan la verdad en materia de vivienda social: "No les da la gana hacer vivienda social, así de claro. Le llaman 'el gran marrón' porque hay muchos impagos y las viviendas se deterioran rápidamente", manifestó.
Bernardos defendió que "si no son capaces y no quieren hacerlo, como mínimo que hagan colaboración pública-privada y que permitan que en los alrededores de las grandes ciudades existan viviendas por 400 euros de alquiler y los jóvenes puedan vivir independientes".