Antes de besar la fama, Andrés Pajares, que no tenía antecedentes en su familia, dio todo por unirse al mundo del espectáculo. Se coló en la televisión haciéndose pasar por periodista.

Con 17 años, ya actuaba en un cabaret hasta madrugada hasta que su padre, que trabajaba en un bar, le recogía. Pajares viene de los tiempos en los que había que sacarse un carnet para dedicarse al oficio de cómico.

Después, murió Franco y España "se puso cachonda", en palabras de Cela. Pajares ya era por entonces un fenómeno de mil caras en las noches del Windsord o el Florida Park cuando llegó el dúo con Esteso.

En el 1991, con 'Ay Carmela', muchos vieron un giro radical en su carrera. Pajares siguió cambiando de registro en películas, series y su siempre querido teatro.