El problema del acceso a la vivienda afecta en gran medida a los jóvenes, pero también a pensionistas que se encuentran con dificultades para afrontar un alquiler. María tiene 20 años y convive con Loli, una mujer jubilada, en Málaga. Un caso de convivencia intergeneracional que la joven relata en laSexta Xplica.
"Tuve que salir de mi ciudad para poder crearme un futuro porque allí era un poco complicado y me fui a Málaga. El primer problema que me encontré allí fue el tema del alquiler: yo no contaba con tener que pagar de 500 a 700 euros al mes por un piso que encima en muchas ocasiones dejaba mucho que desear", cuenta María.
Además, agrega, se encontró con que "hay muchos pisos de alquiler donde no quieren estudiantes". Ante esta situación, encontró una asociación que se dedica a poner en contacto a personas mayores que se encuentran solas -"creo que es un problema del que se habla poco, la soledad", apostilla María- con personas que necesitan una vivienda. Así conoció a Loli.
"Creo que nos hacemos un favor mutuamente: a mí ella me facilita mucho el tema de lo que yo pago de alquiler al mes y yo a ella creo que le hago también un favor porque el acompañamiento que ella necesitaba yo se lo estoy facilitando", resume la joven, cuyo testimonio puedes escuchar en el vídeo.