Es un juez con todas las de la ley. Así es Javier Gómez Bermúdez, firme, directo, impenetrable y también impredecible. Se trata de un hombre que habla claro, aunque no diga ni una palabra.

Pero, ¿qué hay detrás de uno de los jueces más conocidos de España. Nacido en Álora, Málaga, es el segundo de cinco hermanos. Estudió en la Universidad de Granada y fue compañero del exministro López Aguilar. 

A los 24 años ya era juez, nieto de Don Francisco Bermúdez, un magistrado purgado por Franco, toma posesión del cargo llevando la placa de su abuelo. Un legado que hoy sigue colgado de su cuello.

Enamorado de la justicia y de su colección de plumas, aficionado al deporte, a la música clásica y al Quijote. Amante de las motos y los sombreros.  
Uno de los jueces más jóvenes de la historia en entrar a formar parte de la Audiencia Nacional.  Expresidente de la sala de lo penal de este tribunal español, azote de ETA.

Etiquetado como juez estrella, condecorado en tres ocasiones y presente en los juicios más importantes de la historia de nuestro país. Cuestionado  por el poder político e invitado de honor, hace más de dos años que no se sienta en un plató de televisión.