Este lunes, parte de los trabajadores de los servicios considerados no esenciales, que hasta ahora estaban en periodo de confinamiento por el coronavirus, volverán a la normal actividad laboral, una decisión que ha generado discrepancias entre numerosos expertos, que creen que España aún no está preparada para relajar las medidas de prevención frente a la epidemia.
Sobre esta cuestión ha reflexionado en laSexta Noche el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones del Gobierno, José Luis Escrivá, que antes de entrar en materia ha querido poner en valor que "el grado de cumplimiento de las medidas por parte de los ciudadanos ha sido extraordinario".
Sobre la reanudación de las actividades no esenciales, Escrivá ha afirmado que "no estamos volviendo a una situación de gran movilidad", y así ha argumentado esta decisión: "La buena dinámica de la pandemia que estamos viendo ahora refleja los efectos de la situación vigente entre el 17 y 27 (de marzo), y por eso la vamos a reproducir a partir del lunes”.
El ministro ha asegurado que medida ayudará a la "descompresión de las UCI" y que, a partir de esta acción, precedida por "medidas muy intensas", se pueda ir normalizando poco a poco la situación laboral de España. Pero ¿cabe la posibilidad de que se pueda producir el efecto contrario y se produzca por tanto un nuevo aumento en el número de contagios?
"Ahora, esta buena dinámica se acompañará de una serie de directrices y mejores prácticas en el ámbito laboral desde el punto de vista de la protección y el higiene", ha apuntado Escrivá, que también ha entrado a valorar las medidas que está tomando el Gobierno para proteger a los ciudadanos de la crisis económica que va a sufrir España como consecuencia de la epidemia: "Estamos desarrollando una renta permanente que anunciaremos cuando podamos".