Los pellets se agolpan a montones en las playas del norte de España, con especial foco en la costa gallega. A los problemas para su limpieza se ha sumado otro, el debate sobre su toxicidad.

Desde la Xunta de Galicia se reitera que no son tóxicos. Lo hicieron con un informe y también en palabras de su presidente, Alfonso Rueda: "Es un producto que se utiliza en la industria alimentaria y es un plástico".

Alfonso Villares, Conselleiro do mar de la Xunta, también restó importancia a ingerir pellets: "¿Que comemos accidentalmente algún plástico? Pues entran por donde entran y salen por donde salen".

Sin embargo, la directriz es clara: pese a las palabras desde la Xunta, no hay que ingerirlos.