A Vladimir Putin le gusta animar a sus tropas con la copa en la mano o tirando de billetera, pues muchos de sus soldados proceden de zonas humildes. Su sueldo en la guerra puede cambiarles la vida. "A parte hay una atención sanitaria... si has estado en el frente vas a ir por delante de alguien que no ha ido", afirma en el vídeo sobre estas líneas el periodista Marc Marginedas, excorresponsal en Moscú.
Putin ha anunciado nuevas ayudas, y aun así por primera vez en la era post soviética, el gasto militar va a superar el gasto social. El 40% de todo el presupuesto de este año irá a armamento y defensa.
"El armamento ruso no es de muchísima calidad, la industria europea es muchísimo mejor que la de Rusia, pero no está movilizada con el esfuerzo de guerra como sí lo está la de Rusia", comenta por su parte Fernando Arancón, director de 'El Orden Mundial', que sostiene que "Rusia tiene una economía ya transitando hacia la economía de guerra".