"Mi miedo es que la gente al final va a sentir odio en contra de los homosexuales como pasó con los inmigrantes". Es el temor que expresa Gergey en laSexta Columna después de pasear por las calles de Budapest y ver carteles con mensajes como este: '¿Temes exponer a tu hijo a propaganda sexual?'.

En realidad, era una campaña del Gobierno húngaro para aprobar una ley por la que ahora está prohibido decirle a un menor, por ejemplo, que no pasa nada por ser homosexual.

Muchos ciudadanos protestaron por la ley que hoy impide hablar de homosexualidad libremente. Entre las pancartas, vemos comparaciones de Orbán con Putin. Sus discursos, así como sus leyes, se parecen demasiado.