Seguro que muchos se han planteado comer una hamburguesa o pollo frito para celebrar la llegada del fin de semana. Pese a lo que muchos puedan creer, la ciudadanía española está más lejos de la dieta mediterránea de lo que parece.

Y es que, siguiendo la definición de una dieta mediterránea bien entendida, a muchos nos falta consumir más fruta, verdura y legumbres, teniendo excesos en dulces y en carne.

En el vídeo, los expertos dan sus puntos de vista acerca de los consumos que llevamos a cabo y de cómo los hemos cambiado.