A principios de los 2000 Jesús Eguiguren era el presidente del Partido Socialista de Euskadi y Arnaldo Otegi fue su compañero de mesa en un caserío en el que ambos hablaban con el fin de que ETA acabara a través del diálogo.
"Cuando pasaron varias reuniones, nos dimos cuenta de que los dos estábamos convencidos de lo que estábamos haciendo, incluso de que estábamos fanatizados porque no había razones para pensar que aquello diera resultado", relata a laSexta Columna Eguiguren.
"Establecíamos que reunirnos no nos libraba de nada: yo seguía estando en la mira de ETA y él seguía estando en la mirada de la Justicia", añade Eguiguren.
Era el año 2000 y nadie respaldaba a aquellos hombres que hablaron durante años. "No éramos nadie para hacer un documento porque íbamos en nombre propio. Yo estaba convencido de que al final, de una forma u otra, la paz estaba cerca. En la cabeza solo tenía ese afán", zanja el expresidente de los socialistas de Euskadi.
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Por otro lado, Eguiguren echa la vista atrás para recordar el impacto que supuso en 2006 el atentado de la T4 en el aeropuerto madrileño de Barajas. Al respecto, asegura que "de los encuentros surgió la paz". Puedes ver el momento en el vídeo que se incluye a continuación.
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