Una botella llena de agua rompiéndose. Imagínate esto 700.000 millones de veces al año. Es el agua que se pierde en España, lo equivalente a cinco pantanos llenos. "En torno al 16%-17% del agua que está viajando por nuestras redes se está perdiendo", ha lamentado Agustín Ramírez, CEO del grupo Aganova. Somos el tercer país europeo que más agua pierde, siendo el más seco de todos. En algunos municipios se pierde más del 50% de agua que se transporta. La mayoría de ella, en fugas.
Es el gran terror de personas como Raúl Peña, consejero delegado de Axaragua. Su empresa está en Torre del Mar, en Málaga. Lleva el agua de los pantanos a los grifos de más de 160.000 malagueños a través de 100 kilómetros de tuberías: "No podemos permitirnos el lujo de dejar sin agua ni de tirar ese agua porque es un bien muy importante y escaso".
Las tuberías de Raúl están a varios metros bajo tierra, o incluso bajo el agua. Así que, para detectar fugas, tuvo que usar el Nautilus. No el de Julio Verne, sino el de Agustín: un invento 'made in Málaga' en forma de pelota que ahorra millones de litros desde Estados Unidos a Taiwán.
"Es un sistema diseñado para detectar fugas de agua en tuberías de gran diámetro que van por debajo de ríos o en otras zonas totalmente inaccesibles", explica Agustín. Sobre esta explicación añade Raúl: "Meten un balón dentro de la tubería y van analizando las posibles salidas de agua".
