Madrid no ha parado de crecer en las últimas décadas. Y todo, con un mensaje goloso sobre la bajada de impuestos que ya prometía Esperanza Aguirre y que, ahora, Díaz Ayuso ha heredado con convicción. Ambas son gemelas fiscales, unidas en la lucha contra los impuestos desde siempre.

Sin embargo, con los impuestos tan bajos, la inversión en sanidad también mengua en consecuencia. En 2018, según el último dato disponible, la Comunidad de Madrid gastaba únicamente 1.274 euros por habitante en Sanidad, por debajo de la media nacional, que situaba en los 1.416 euros.

Ahora, en la lucha contra el coronavirus, destinar dinero a la Sanidad se ha vuelto importante. "Destinaremos 90 millones a la atención primaria", aseguró Ayuso. Pero más allá de esas inversiones futuribles que propone la actual presidenta de la Comunidad de Madrid, el presente es otro, y está marcado por un virus que ha provocado una crisis sanitaria casi sin precedentes.

Según Sanidad, Madrid sólo cuenta con seis centros de salud y consultorios de atención primaria por cada 100.000 habitantes, lejos de los 162 por cada 100.000 habitantes de la comunidad que más tiene, Castilla y León. Son muchos los sanitarios que creen que la privatización ha hecho mucho daño a la atención primaria y a los hospitales. Ahora, el nivel asistencial está desbordado.