Cuando Mario Conde ya era muy rico, lo que se propuso entonces fue conquistar los cielos. En 1989, Banesto se lanza a patrocinar un equipo ciclista, al que pone su nombre con los triunfos de Induráin. A partir del primer tour ganado por Banesto, en 1991, Conde se aseguraba visibilidad. 

Ese mismo año, en Moscú, el banquero flirteaba con la política, acompañando al entonces presidente del gobierno español, Felipe González, y a su vicepresidente, Alfonso Guerra, para vender las bondades de la transición en España. "Aprovecharon la oportunidad para hacer un seminario", explica Pepe Hervás, director de Comunicación de Banesto aquellos años, que asegura que este "contó con la financiación y la participación de Mario Conde". 

El periodista Miguel Ángel Nieto señala que este episodio "tenía mucho más que ver con la voluntad del PSOE de hacerse con un banco que la de Mario Conde de hacerse con el Gobierno". Tras vender su yate y el tablao flamenco, se especulaba con que Mario Conde había cambiado su imagen para preparar su carrera política. ¿Podría haber llegado a presidente? laSexta Columna plantea a los expertos esta cuestión en el vídeo sobre estas líneas.