¿Cómo lograban que la gente matara en contra de sus ideales durante la Guerra Civil? Lo que hicieron fue convertir el pensamiento del enemigo en algo a perseguir. Los nazis ya lo habían hecho quemando libros en 1933, con el objetivo de eliminar el supuesto espíritu antialemán de otras tendencias políticas o de los judíos.

Sin embargo, es más desconocido que desde el principio de la Guerra Civil el bando golpista también hizo sus hogueras 'biblioideológicas'. "A medida que iban entrando en cada plaza del pueblo, se hacía una quema, que era muy simbólica, muy emblemática, de arrasar la cultura del enemigo e imponer 'buenas lecturas' acordes con el nuevo Estado", señaló a laSexta Columna Ana Martínez Rus, doctora en Historia Contemporánea de la Universidad Complutense.

Además, Martínez Rus indicó que el bando golpista "consideraba que la guerra era una hecatombe, y que la habían provocado estas lecturas, por lo que del mismo modo que se estaba separando a los buenos de los malos españoles, había que separar a los buenos libros de los malos".

En la Guerra Civil, la propaganda jugó un papel fundamental basado en el odio a quien no compartía las ideas contrarias, pero también lo hizo el miedo. "Había gente muy convencida de que tenían que ganar, pero no todos estaban tan concienciados", expresa al respecto la historiadora.

(*) Desde laSexta.com estamos recuperando los mejores reportajes de laSexta Columna, como este emitido el 27 de mayo.