La inflación se encuentra disparada en España, pero esta no es la primera vez que nuestro país sufre una inflación al borde del 10%: ya ocurrió en 1985, la última vez en la que estuvo tan alta como este pasado mes de marzo. Entonces, igual que ahora, este fenómeno se notó, y mucho, en las gasolineras y tanto entonces como hoy, la solución del Gobierno para paliar los precios de los carburantes fue similar: subvencionarlos.

A juicio del profesor de Economía Manuel Hidalgo, "estamos repitiendo parte de la historia", pero, según detalla la catedrática María Ángeles Pons Brias, si en aquel momento el problema fue el petróleo, "ahora es más complejo", porque entra en juego también el gas o la subida de precio de materias primas.

Tanto en 1985 como en 2022, la subida de precios generó protestas, pero en aquel momento el Ejecutivo pactó con las eléctricas que los precios subieran como mucho un 8% para evitar su nacionalización y ahora quiere hacer algo parecido tomando medidas en Europa, donde el escenario es muy distinto: en el 85, España acababa de entrar en el mercado común europeo y esto nos ayudó a salir de la crisis, pero ahora pedimos a Bruselas ser una excepción en el mercado energético.

Otra diferencia fundamental: entonces quedaban nuevos yacimientos de petróleo que explotar para rebajar la inflación, pero ahora, según advierte el investigador del CSIC Antonio Turiel, "hemos topado con los límites de producción del planeta".

Las consecuencias de la inflación en la historia

A lo largo de la historia, la pérdida de valor del dinero ha traído consigo cambios pivotales en la economía, pero también en la política... a menudo, con nefastas consecuencias: