Seis meses después de la Revolución de Asturias, José María Gil-Robles fue nombrado ministro de Guerra de la República, tras lo que volvió a dar poder a un Ejército al que Azaña había limitado. Entre otros, dio poder a Franco, que posa junto a él en la foto que puedes ver en el vídeo principal que acompaña a esta noticia. Además, ascendió a otros militares fundamentales para el golpe de Estado de 1936.

Álvaro Gil-Robles afirma en laSexta Columna que su padre pensaba que "había que rearmar al Ejército y poner oficiales lo más competentes posibles". "Él dice que el oficial más reconocido por todo el ejército era Franco, y por eso le hizo Jefe del Estado Mayor", señala.

Sin embargo, "lo que nunca llegó a pensar", tal y como reconoce Gil-Robles hijo, "es que haría la sublevación del 18 de julio". "Luego Franco le perseguiría toda su vida, así que tanto amor no se tenían, Aunque dice mi padre que cuando se fue del Ministerio de Guerra, Franco lloró. Cocodrilo o no cocodrilo, pero lloró", expresa el hijo del líder de la CEDA.