Amanece en Burgos. El barrio de Gamonal despierta. En realidad, hace semanas que despertó. El brote violento cerró meses de movilizaciones pacíficas, reuniones de vecinos y recogidas de firmas. Una lucha contra el proyecto estrella del ayuntamiento de Burgos: el boulevar de la calle Vitoria, una promesa de su programa electoral.

“Zona peatonal” sonaba bien pero la obra iba a costar más de 8 millones de euros y además suponía eliminar 400 plazas de aparcamiento en superficie y construir 250 bajo tierra. Menos sitio para dejar los coches y encima de pago. A casi 20.000 € la concesión. Así que los vecinos dijeron “no”.

Gamonal está ahora tranquilo. Ya no hay disturbios, los medios de comunicación se han ido, las asambleas han menguado y laSexta Columna ha vuelto a descubrir cómo es este barrio que lleva medio siglo de lucha en lucha.

Celes llegó a Gamonal en los 60, cuando pasó de pueblo agrícola a barrio obrero. Poco después llegó Mila. Como ellos, miles de personas cambiaron el campo por la ciudad en busca de trabajo.

El ladrillo lo sepultó todo. Cada parque, edificio público, árbol o plaza fue el resultado de una lucha vecinal. Así se moldeó Gamonal y tantos barrios de tantas ciudades españolas.

Otra batalla ganada fue en 2005
El anterior alcalde quiso hacer otro parking subterráneo en el barrio, los vecinos se lanzaron a la calle y el proyecto se paró. Mila se emociona al recordar tantos años de reivindicaciones.

En 2005, se señaló a los autores como “izquierda radical”. En 2014, como radicales llegados desde fuera de Burgos. Luego se demostró que sólo 2 de los más de 40 detenidos no eran de ciudad. Pero el mensaje oficial era otro.

Hace nueve años, los vecinos sólo vencieron cuando los contenedores ardieron. Ahora, también. Las protestas de 2005 y 2014 tienen otro punto en común: Javier Lacalle. El concejal de urbanismo de Burgos de entonces es hoy el alcalde de la ciudad. Lacalle ha salido tocado del conflicto de Gamonal y uno de los nombres que más se ha repetido en las manifestaciones ha sido el suyo.