En los años 90 Felipe González era el "mesías" socialista. Un auténtico ídolo para multitudes de creyentes que devoraban una teoría política que consiguió popularizar: la del voto útil. Con este concepto el PSOE pretendía arrebatarle votantes a Izquierda Unida.

Pablo Simón, doctor en Ciencias Políticas, asegura que una vez cruzado el umbral del 5% "cualquier partido consigue más o menos los escaños o los concejales que le corresponden". "Por lo tanto, aquí la cuestión clave está en que se cruce dicho umbral", aclara en laSexta Columna, como puede observarse en el vídeo superior.

Más de dos décadas después de aquella estrategia 'felipista', Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, retoma el método del voto útil y desea que los votantes de Vox se pasen al Partido Popular. "Sé que hay votantes de Vox que desean gobiernos fuertes y comprometidos con nuestro país (...) si quieres cambio, concentra el voto en el PP", ha manifestado durante la campaña electoral. Para Ainhoa Martínez, periodista en La Razón, los pactos con Vox "le pasan factura a Feijóo". "Sólo hay que ver los mensajes que está lanzando durante la parte final de la campaña; el llamamiento que está haciendo es al voto útil, algo que funcionó muy bien en Andalucía porque la campaña del miedo a Vox acabó en una corriente de voto útil hacia el PP", recuerda la periodista.

Para evitar la fuga de votos, los de Abascal se lo han "currado" presentando un programa electoral "personalizado" en cada municipio de España. Entre sus propuestas en Barcelona aparece la promoción "del pastoreo". Mientras que en Salamanca prometen nuevas líneas de metro -aunque no cuentan con este medio de transporte en la ciudad-.