A finales de los 80, Mario Conde era un líder encantador y exitoso, pero además, quería asegurarse de que era así. Pepe Hervás, director de comunicación de Banesto con Conde, muestra a laSexta Columna los papeles que lo demuestran, los de las muchas encuestas que se hacían para saber cuál era la valoración de Mario Conde. 

"El banco encargaba un sondeo mensual y él casi siempre salía en este sondeo como el banquero más conocido y más apreciado", afirma Hervás en el vídeo sobre estas líneas, donde también añade que "también había otra característica, cuántos rechazos representaba, y en el tiempo que yo estuve allí era también el banquero que menos rechazos representaba". 

Cuando estaba en lo más alto, la televisión iba a la universidad para preguntar a los estudiantes y Mario Conde era la persona a la que te tenías que parecer. Se le vendía como el ejemplo de la meritocracia, el 'si tú quieres, puedes', en una España donde el propio ministro de Economía, Carlos Solchaga, vendía como gran objetivo hacerse rico.