'Esclavos del horario: trabajar de sol al sol' analizará la jornada española: la costumbre de parar dos horas para comer y alargar el horario de trabajo hasta muy tarde, una costumbre casi única en Europa. Países con costumbres y clima similar, como Portugal o Italia, no lo hacen. ¿A qué se debe? Según los expertos, estos horarios alargados en el tiempo hacen que seamos menos productivos e impiden que podamos conciliar vida laboral con personal. La pausa a mediodía nos hace salir tarde y que no haya quién se encargue de recoger a los hijos del colegio y estar con ellos.

Las más perjudicadas son las mujeres, que son las primeras de la pareja en sacrificar su futuro profesional para poder atender a los hijos: más del 90% de las mujeres que dejan su trabajo lo hacen para cuidar a los hijos o personas dependientes. También afecta a los abuelos, que tienen que encargarse de los nietos. El programa cuenta con el testimonio de personas a las que los horarios partidos no les permiten llevar una vida personal y familiar equilibrada.

Además, mostrará el caso de empresas que aplican jornadas europeas, continuas, y que han aumentado la productividad y la satisfacción de los trabajadores.También plantea el debate, ya que para algunos los horarios españoles permiten un estilo de vida más relajado y unirnos al horario de trabajo europeo supondría perder calidad de vida.