Salvados recupera las imágenes de los primeros viajes de personas jubiladas que disfrutaron de 15 días en Benidorm en lo que supuso el primer viaje del Imserso. "Todo el que esté triste, que venga a Benidorm", aconsejaba una mujer allá por 1985.
El precio de aquel viaje fueron 10.000 pesetas, un dinero con el que podían disfrutar como lo hacían "los americanos o ingleses" que pudiesen ir a Benidorm. "Lo llaman el paraíso de las viudas porque ellos están en el cielo y ellas, en la gloria", bromeaba una mujer.
Entonces, se hablaba de que hasta 160.000 pensionistas podrían disfrutar de este novedoso plan. Hoy, casi 40 años después, más de 800.000 personas acceden a este plan de vacaciones, con Benidorm manteniéndose como uno de los principales destinos turísticos.