Noelia Cruz, Lucía Ortega y Laura Maldonado tienen varias cosas en común: son treintañeras y temen por su pensión. Y es que, viendo a gente mayor jugando tranquilamente a la petanca, no se imaginan a su generación así cuando les llegue la hora de jubilarse.

Lucía Ortega tiene 29 años y lleva cotizado un año. “No sé qué futuro me espera”, asegura. Las mujeres no tienen claro el cobrar la pensión, ya que el envejecimiento de la población y la precariedad laboral la ponen en peligro.

Las jóvenes la solución que encuentran es un plan de pensiones privado  “para privilegiados que puedan pagarlo”, comenta Laura Maldonado, ya que el sueldo prácticamente se lo lleva la hipoteca.  Y es que, el futuro de la generación de los 30 es “poco halagüeño”, declara Noelia Cruz.