Ana Martínez, voluntaria del Ejército de Salvación reparte comida y ayuda a entenderse a los que no saben noruego ni inglés. Llegó como emigrante y por ello, ha cambiado mucho su punto de vista. “Es todo tan difícil”, porque cuando están fuera de tu país “tienes que demostrar todo”.

Jordi encuentra a un español dentro del Ejército de Salvación. Lleva un año en Noruega y cuenta su experiencia en el país. La dureza de vivir en un sofá cama, sin saber ni inglés ni noruego. Él es soldador y estuvo trabajando en negro pero ahora lo ha dejado. Su dinero se terminó a los dos meses.