Mónica Oltra ha confesado que, tras lo que le ha sucedido, tiene una "crisis de fe" en cuanto ala Justiciase refiere, dejando claro que este es uno de los motivos por los que no ha querido abrir un despacho de abogados tras dejar la política.

Para su familia, el caso por el que ha sido imputada ha sido como "una bomba atómica" de la que están intentando recuperarse. Por este motivo, durante estos cinco meses que lleva apartada de la política, ha decidido centrarse en sus hijos para "sostenerles" y conseguir que "no pierdan la fe".