Jordi Évole le enseña a Roberto Saviano un vídeo de un diputado del Congreso español, un diputado vasco, el señor Emilio Olabarria, que interpelando al ministro del Interior aseguraba conocer “nombres de ministros que han consumido sustancias de esta naturaleza y nombres de jueces que han consumido sustancias  de esta naturaleza y nombres de altos funcionarios policiales que han consumido sustancias de esta naturaleza”.

El escritor italiano explica que “la política española ignora, cuando no es connivente, este gigantesco problema” y se refiere a lo visto en el vídeo como “interesante porque muestra una especie de incomodidad moral, de ironía, cuando en realidad es un drama económico”.

"Se tienen los elementos para combatir el problema pero no hay voluntad política"

Un responsable político de la lucha antimafia en Italia decía que más de 50 km de la Costa del Sol se han edificado con dinero procedente de las mafias italianas. Saviano da nombres “Antonio Bardellino, Nunzio De Falco, la organización de los Tano Bandalamenti… fueron los primeros en invertir después del franquismo por eso la llaman ‘La Costa Nostra’.

Y es que la especulación inmobiliaria se ha convertido en nuestra forma autóctona de blanquear el dinero de la droga. “La especulación inmobiliaria catalana, ¿quién la hizo? Los narcotraficantes; todo el dinero que ha hecho explotar la burbuja española, ¿de dónde venía? Provenía del dinero del narcotraficante”, asegura.

La denuncia que Roberto Saviano hace de que en España se subestima el poder de la mafia, también la hacía un periodista español llamado Íñigo Domínguez, que publicó un libro titulado ‘Crónicas de la mafia’. Aseguraba que los jueces italianos se quejan de que países como España o Alemania no tengan una legislación acorde con la magnitud del problema. El escritor le explica a Jordi Évole que la Policía se le queja de que no tienen medios para requisar el dinero de la mafia, no tienen medios para arrestarlos por delito de asociación.

Roberto Saviano comenta que “en España se tienen los elementos para combatir el problema pero no hay voluntad política” porque “la pela es la pela y la coca genera tanto dinero… más dinero que problemas”.