El papa Francisco ha asegurado en Salvados que no quiso
decir que los homosexuales tenían que ir al psiquiatra, asegura que el idioma
le falló, y ha matizado que quiso decir un "profesional", un "psicólogo".
El pontífice ha lanzado un mensaje a los padres de niños
homosexuales "si ven cosas raras, consulten, vayan a un profesional". Además,
asegura que "las tendencias no son
pecado".
En este sentido asegura que "toda persona tiene derecho a
tener un padre y una madre, venga como venga": "Si hay un caso de homosexualidad,
yo comprendo que en una familia eso provoca dolor, pero diálogo. Nunca se echa
del hogar".
"Cuando la persona es muy joven, muy pequeña y empieza a
mostrar síntomas raros. Ahí conviene ir (…) a un profesional, a un psicólogo
que más o menos vea a qué se debe eso", asegura.
Dice que "en teoría no" ve una rareza que un hijo sea
homosexual pero apunta que "para una familia es raro. Se escandalizan". Pide
que las familias "se saquen la duda con un profesional y tienen derecho a
hacerlo. Tienen la patria potestad y todo eso".