"Señor Viada, con la experiencia que usted tiene en la carrera judicial y por los puestos por los que ha ido pasando, ¿diría que se puede ascender sin la ayuda de padrinos políticos?", pregunta Gonzo a Salvador Viada, fiscal del Tribunal Supremo. "Sí se puede, porque esto es un tema complejo", explica Viada, que afirma que "se ha introducido dentro de la carrera judicial y de la carrera fiscal el factor ideológico interesadamente desde la política".
Para explicarlo de mejor forma, Viada cuenta una anécdota de hace unos años en la Sala Segunda, en la Sala de lo Penal: "Había dos magistrados que habían tomado posesión recientemente. Fui a saludarles y estábamos los tres juntos. Entonces, uno de ellos le dijo al otro, yo estoy aquí por ti', y el otro dijo 'y yo por ti'".
"Es decir, uno era del sector progresista y otro, del sector conservador. Entonces, los dos son y han dejado una trayectoria muy buena como magistrados, pero lo cierto es que ellos eran conscientes de que fue un pacto en el Consejo General del Poder Judicial en virtud del cual el sector progresista cedía para votar al otro y el otro al uno", explica Viada.
Por su parte, Gonzo reflexiona sobre ello, "en esa anécdota lo que reconocía uno es que había llegado ahí porque le había puesto el PP y que, a cambio, el PP había permitido que el PSOE pusiese al otro juez que estaba en esa conversación". "Era un chiste, pero evidentemente era un chiste que se entendió por todos los que estábamos allí", señala Viada, a lo que Gonzo contesta tajante: "Un chiste de mal gusto, en cierta medida, si entendemos que la justicia es independiente del Poder Ejecutivo o Legislativo".
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