El presentador de ‘Salvados’ comienza hablando con el asesor de Comunicación Antoni Gutiérrez-Rubí de la crisis del ébola y las polémicas declaraciones que hizo Javier Rodríguez, el ya exconsejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, acusando a Teres Romero de haberse infectado del virus por un descuido. “Cuando alguien se está jugando la vida y está a punto de morir, que un responsable político aproveche esta situación para hacer una acusación así me parece impropio, improcedente  y para muchos ciudadanos, insultante”, asegura.

El asesor explica que cuando hay una situación como la vivida con el ébola, la Administración “primero tiene que llegar a tiempo y hacerlo de manera periódica y hacerlo con serenidad y casi siempre situar en la responsabilidad de la información y de la gestión a alguien con competencias”.

Gutiérrez-Rubí asevera que en España la reacción ante una catástrofe o situación de emergencia, “casi siempre, no está a la altura del tamaño de la crisis. Esta insuficiencia, esta incapacidad genera ya un primer problema, que es desconfianza en la autoridad política y pública”, comenta. Como por ejemplo el caso del Spanair o del Yak o incluso el Alvia donde “las reacciones han sido desiguales y en algunos casos desafortunadas  y han generado graves problemas”, asegura.

Tres tragedias que tienen características comunes. “La primera es que se busca rápidamente un culpable  y no siempre se buscan las causas. La segunda es que las administraciones, los responsables políticos se eximen de toda responsabilidad. La tercera es las dificultades  en las que empiezan las comisiones de investigación, la celeridad de estas, su composición... Y quizá la que más daño hace es el tratamiento a las víctimas y a los familiares de las víctimas”, explica.

En estos tres casos se responsabilizó del accidente a los pilotos y a los conductores. Sin embargo, el asesor de Comunicación no cree que todos fueran errores humanos. “Casi siempre en una tragedia de estas características las causas son múltiples, ni siempre hay una causa única ni casi siempre solo un error humano. Un piloto o un conductor puede cometer un error humano, pero las infraestructuras, los equipos, los procedimientos  lo que hacen y deben de hacer es minimizar o impedir que un error humano tenga consecuencias”.

Según Antoni, cuando la Administración señala el error humano como causa fundamental de la tragedia busca “en muchos casos evitar su propia responsabilidad o dar una respuesta rápida frente a la presión de la opinión pública o de los medios de comunicación que lo que buscan son las causas”, asegura.