Pedro Antonio Luis y su hijo Daniel Alexis trabajaron en el centro que Amazon tiene en Sevilla hasta que les abrieron un expediente sin explicarles el motivo. Ahora, el primero de ellos explica lo duro que era trabajar allí. Él estuvo ocho meses contando artículos para ver si coincidía con lo que realmente tenía que haber. "Entonces venían los policías de la producción, que son tus gerentes o tu mánager de área, para decirte que había que subir la productividad".

Este extrabajador ha confesado que el trabajo suponía un gran desgaste, algo a lo que tenía que sumarle "el acoso por parte de estos policías de la producción". Un testimonio con el que coinciden otros trabadores, que han explicado en qué consistía su trabajo, dejando claro que hasta aquellas personas con puestos más altos sentían una gran presión por llegar a las cifras que querían.