Julio Iglesias se presentó al X Festival de Benidorm (1968) con la canción 'La vida sigue igual', uno de sus éxitos más aclamados por el público. Sin embargo, este tema en un principio no iba a ser cantado por él. Hasta llegar a lo más alto, Julio Iglesias que iba para futbolista (jugaba en las categorías inferiores del Real Madrid) tuvo un accidente que cambió para siempre su carrera.

Dejó el fútbol y empezó a componer canciones con su guitarra. Una de aquéllas fue La vida sigue igual, que presentó al X Festival de Benidorm. Tal como cuenta Miguel de los Santos, periodista y amigo de Julio Iglesias en el documental Pongamos que hablo de Julio Iglesias, disponible en ATRESplayer PREMIUM y presentado por Iñaki López, "no estaba previsto que Julio interpretase la canción, él solo era el autor".

La interpretación iba a correr a cargo de un grupo llamado Los Gritos, sin embargo, le propusieron que fuera él quien la cantase. "Al principio Julio no quería, pero finalmente, le convencieron", relata de los Santos. Y así empezó su carrera. Ganó ese festival y dos años después quedó en cuarta posición en el Festival de Eurovisión 1970, celebrado ese año en Ámsterdam, con su conocida canción 'Gwendolyne'.

Hasta llegar a lo más alto, Julio Iglesias, cuenta por su parte el periodista Juan Ramón Lucas en este documental, tuvo que hacerse un nombre participando en los festivales de jóvenes talentos de la época "que eran para la música española lo que son ahora los programas de contenido musical como Operación Triunfo. La gente que tenía capacidad para la música y que quería triunfar se apuntaba a un festival de este tipo, o bien "tenía la suerte de que te viera Valerio Lazarov (fue un famoso director y productor de televisión) o alguien con capacidad para colocarte en TV".