El presunto ladrón explica a los agentes de policía que había visto desde la ventana de su casa a una persona intentando robar en el interior de un coche, y que había bajado para evitar el hurto.
La mujer afectada contradice su versión. Explica a la policía que, tanto ella como su marido, le habían visto intentando efectuar el robo. El presunto ladrón sigue defendiéndose ante la policía.