El responsable de la publicidad de un bar (repartidor de flyers) ha sido golpeado con un vaso roto en la cara. Tiene cortes con sangre en un ojo, y varias heridas en los labios.
La víctima explica a los agentes que un cliente le ha agredido tras advertirle que no podía beber con un vaso del local en la calle.
Le ha provocado cortes graves en su ojo, que contiene finos trozos de cristal. Podría perder la vista.