La policía de Madrid recibe una llamada requiriendo su intervención en una reyerta entre ocho personas.
Llegados encuentran a los implicados con varias heridas con sangre en la cara. Uno explica que han intervenido con violencia para defender a una mujer de un hombre que intentaba violarla.
Cachean a los individuos, y la mujer identifica al agresor.
Proceden a detenerlo, pero el hombre se resiste y daña un vehículo policial. Vacila y agrede a varios agentes.