Barrio de Villaverde Alto, Madrid. En este distrito popular del sur de la capital se encuentra 'La Madrina', un restaurante de comida latina enormemente marcado por el carácter de su dueña Mónica, una mujer ecuatoriana que controla absolutamente todo, no acepta las críticas ni se deja aconsejar por nadie.
El férreo control de la dueña repercute negativamente en el negocio y de continuar así, el sueño de la familia se puede desvanecer. Además, la diferencia entre la enorme cantidad de comida que sirven en el plato y los bajos precios no ayudan a que salgan las cuentas, a pesar de tener a favor que la calidad de la comida es más que aceptable.
Tras conocer al personal, probar la comida y observar el caos que se genera en 'La Madrina' durante los servicios, Alberto Chicote es testigo directo del difícil carácter de Mónica hasta el punto de rozar la desesperación. La madrina ignora al chef, no acepta sus críticas e incluso lo mira en ocasiones con desprecio.
Alberto Chicote alucina
La risa del dueño del CD Estoril ante el enfado de los clientes: "Me da miedo salir, me iba a ir y casi me linchan"
"¿Qué es lo divertido?", pregunta alucinado Alberto Chicote a Álex, dueño del Estoril, que entra en la cocina riéndose por el enfado de sus clientes: "Tienes a la gente fuera sin comer ni beber y cagandose en la puta...".