El chef de Pesadilla en la cocina no da crédito al descubrir cómo apañan los platos en 'El Cantábrico'. Los cocineros tiran de albóndigas congeladas apañadas con una salsa de crema de verduras que no convencen a los comensales.

Mariluz, dueña y camarera del buffet libre, informa en cocina de que se ha acabado la bandeja de huevos para que se reponga, pero el cocinero dice que ya no quedan más y se dispone a inventarse un plato. El resultado deja a Chicote a cuadros.

Al terminarse uno de los platos que se ofrece en el buffet libre, Chicote pregunta qué se hace en estos casos. Antonio, el cocinero explica que se sustituye por otro plato y le cuenta que va a mirar qué tiene en la nevera para inventarse algo.

Mientras los clientes se quejan en el comedor, el chef ve a Ramón meter albóndigas congeladas en la freidora, ante la sorpresa de Chicote. Antonio, otro de los miembros del personal de cocina explica que "hoy en día todo es congelado" aunque Chicote no coincide con él.

El cocinero crea un plato de albóndigas express y se lo explica a Chicote: "Esto es una crema de verduras, de un refrito y ahora le echo un poco de agua y ya tengo la salsa de las albóndigas".

"MA-RA-VI-LLO-SO", así reacciona Chicote ante esta solución y el cocinero asegura que así son los 'service', pero el chef le corrige: "Así son los 'service' malos".

Los clientes en el comedor no quedan nada satisfechos con el plato inventado: "Están crudas, la comida de mi gato está más buena", dice una clienta. Otro comensal asegura que "no compensa ir al restaurante aunque sea económico".

Otros momentos destacados

Por primera vez en la historia de Pesadilla en la cocina, Alberto Chicote cuenta con ayuda para degustar y valorar los platos de este buffet libre de Cádiz. El humorista, actor y cantante Pablo Carbonell acompaña al chef para someter a examen la oferta culinaria de 'El Cantábrico'. Una experiencia que califica como una "auténtica pesadilla".

Tras la cata, Alberto Chicote y Pablo Carbonell echan un vistazo a la cocina de 'El Cantábrico'. Allí conocen a Antonio y Ramón, los dos cocineros del buffet libre que les enseñan las condiciones en las que se encuentra su lugar de trabajo. Después de ver la "pocilga" que tienen como cocina Chicote pide responsabilidades. Tras no recibir respuesta, tira de ironía: "¡Bah! ¡Qué más da! Si una cocina es un espacio naturalmente sucio".

Para ver cómo trabajan, el chef Chicote es testigo del primer servicio de 'El Cantábrico'. En él descubre porqué los platos tienen tanta grasa y están tan aceitosos. Además de un vistazo rápido conoce la razón por la que el "aceite está más negro que la conciencia de Voldemort".

Al finalizar el caótico servicio, llega la hora de hacer balance. El chef de Pesadilla en la cocina echa en cara a Francisco que no se haya comportado en cocina como un líder y a los cocineros que hayan hecho una "albóndigas de mierda en tres minutos" para sustituir un plato que se había terminado. Una crítica que Ramón, el cocinero, se toma muy a pecho y por la que acaba abandonando el buffet libre. "¡Quitadme el micrófono o me lo arranco!", amenaza.