El último programa de 'Palo y Astilla' de laSexta ha tratado sobre uno de los personajes más queridos de la televisión. Alberto Chicote, el cocinero que alcanzó la fama gracias a su programa 'Pesadilla en la Cocina', muestra durante 60 minutos emocionantes cuáles son sus orígenes y qué es lo que le ha convertido en lo que es actualmente.

A pesar de que muchos le tienen por una persona gruñona y árida, él se defiende. "Soy así en las circunstancias en las que tú me ves en televisión", asegura el cocinero. Su familia lo confirma, asegurando que Chicote es "muy cariñoso" y solo se enfada fuera de la pantalla cuando se reproducen las situaciones que ocurren en su programa.

El Chicote más familiar y reivindicativo

El reportaje realizado por Mamen Mendizábal aleja a Chicote de los fogones para mostrar al hijo, el hermano, el sobrino y la pareja. Y pronto queda claro que la pasión y el esfuerzo vienen de la familia. El chef recuerda cómo se crió en las calles de su barrio de Carabanchel junto a su hermano, mientras su padre José María trabajaba todo el día para mantener a la familia.

Su madre, Angelines, era la que tenía más contacto con Alberto y su hermano. La disciplina en la casa de los Chicote era estricta, tanto que desde fuera se veía a Angelines como "un poco sargento". Sin embargo, su hermana Rosa opina durante el documental que "visto el resultado, no se ha equivocado". El chef agradece además que su madre le mantuviera alejado de las calles del barrio, que en su juventud era "un foco de todo lo malo".

Esa disciplina, unida a la pasión por el trabajo de su padre, han hecho de Chicote la persona que es hoy: cocinero de renombre y estrella de la televisión. Un estatus que ha aprovechado en los últimos tiempos para realizar un contenido menos centrado en el entretenimiento y más en la denuncia social. Con '¿Te lo vas a comer?', estrenado en laSexta en 2018, Chicote aborda fraudes, timos y delitos cometidos por empresas en cuanto a servicio de comidas. Algo por lo que Angelines, la persona "más peleona" de la familia, ha felicitado a su hijo. Chicote reconoce que es el programa que más orgullo le da a su madre. "No me lo dice, pero lo noto", asegura el cocinero.

La 'tribu' Chicote

El reportaje de Mendizábal ha dejado multitud de momentos interesantes para entender la figura del chef, como uno en el que Chicote explica de dónde viene su característica pulsera. "Me la regaló un masái en Kenia", comenta el entrevistado. Durante un safari, el cocinero le preguntó a su guía qué pasaría si se encontraran con un león, a lo que le respondió mostrándole una lanza y un puñal. "Pero, ¿y si me encuentro yo solo?" preguntó Chicote. La respuesta se convertiría en una lección de vida para el chef: "Si estás solo, estás muerto". El masái le regaló la pulsera para que nunca se olvidase de esta frase.

Chicote consiguió unas cuantas para su familia, incluso para su nieto. "Cuando se la di, con 5 años, le hizo una ilusión loca". El cocinero achaca esta alegría a "un rollo de pertenencia de tribu". La pulsera se ha convertido en un símbolo tal que a José María, viéndole con ella y sabiendo su apellido, ya le identifican como el padre de Chicote. Pero más allá del simbolismo de este accesorio, al cocinero y presentador la experiencia le ayuda a recordar una máxima que rige su vida: "Mientras tenga a estos del circulito cerca, nada malo va a pasar".

Friki y jugador de rugby

Alberto Chicote nunca ha ocultado algunas de sus grandes pasiones aparte de la cocina, como su amor por la ciencia ficción y los cómics. Parte de culpa la tiene su tío Mariano, que llevaba a los hermanos Chicote a ver las películas de 'Star Wars', y le proponía que intercambiara cómics a sus primos.

La otra gran afición del cocinero es el rugby, deporte que practicó en sus años de juventud con su hermano y que considera esencial para formar su personalidad. Considera que la filosofía de este deporte va mucho más allá de ganar un partido, y tiene más que ver con "el esfuerzo, el espíritu de equipo, la solidaridad"... cosas que aprendió "tragando hierba en un campo".

La importancia de no ocultar nada

Chicote cree que la base de su relación familiar es la confianza que existe con sus padres desde edad muy temprana. El protagonista de 'Palo y Astilla' recuerda las "asambleas" familiares en las que se hablaba de todo, desde la gestión de la casa hasta qué se podía hacer con el dinero que sobraba después de pagar los gastos.

Esta capacidad de tomar decisiones en común le hizo ver el valor de trabajar en equipo y de no ocultar nada, tanto por parte de los padres como de los hijos. Chicote entiende que nunca trataron de ser sus amigos, sino que entendieron que su labor era otra, y gracias a ello consiguieron llevarle hasta donde está ahora.

Al final del reportaje, Chicote y sus padres ven un vídeo en el que el cocinero resume su educación con la palabra "agradecimiento", asegurando que no cambiaría a sus padres "por nada del mundo".

El nuevo capítulo de 'Palo y Astilla' en AtresPlayer ya está disponible.