Emilio Valverde, padre por vientre de alquiler, reconoce que el proceso burocrático es "complicado". "Hay unos controles psicológicos tanto de los padres como de la gestante", explica en Más Vale Tarde. Del mismo modo, asegura que, en su caso, era prioritario que la gestante quisiera mantener el vínculo. Es más, cuenta que este verano han ido a verla y que ella y su familia vendrán a España el año que viene.
"Nuestro caso era prioritario que la gestante quisiera mantener un vínculo entre nosotros porque nos parecía que era bonito que nuestros hijos la conocieran. Es una persona que les ha ayudado a nacer y a la que le estarán agradecidos toda la vida", explica. Así, asegura que la elección es una especie de match. La pareja y la gestante han de estar de acuerdo: "Nosotros elegimos y ellas también eligen a la pareja".
En este sentido, explica que la ley pide a las gestantes una estabilidad emocional, económica y familiar. "Hay unos requisitos que establece la ley, como hijos previos, una edad, un trabajo y estabilidad familiar", asegura. De hecho, reconoce que en su caso, la gestante, a quien conocieron de la mano de su marido, no necesitaba ese dinero para vivir. "De manera absolutamente altruista quiso dar a luz a nuestros hijos. Era algo que ella quería desde que estaba en la facultad", señala.