El actor español Rodolfo Sancho ha este sábado a que se marcha "tranquilo" de Tailandia, donde ha estado casi una semana para visitar a su hijo, Daniel Sancho, en prisión provisional por el asesinato del colombiano Edwin Arrieta, debido al buen trato de las autoridades. "Estoy gratamente sorprendido, me he quedado muy tranquilo (…). Daniel está muy bien cuidado por gente tremendamente amable, que es lo que me he dado cuenta que es la gente en este país", ha explicado en unas declaraciones a Efe.

"En principio parecían que iban a ser unos horarios muy férreos, que cuando se acabara ese tiempo me iban a echar. Y para nada. Me han dejado estar mucho más tiempo con Daniel del que estaba previsto y estipulado", ha detallado en una conversación telefónica. "Yo pensaba encontrarme a un Daniel mucho más delgado", pero "no solo no está más delgado, sino que ha cogido peso", ha añadido. Rodolfo ha explicado que la realidad es que su hijo "tiene un gimnasio donde entrena" y que además "está muy bien alimentado".

"Estoy muy contento de saber que en las cárceles tailandesas no hay violencia dentro, no hay ningún tipo de mafia dentro, no hay droga dentro", ha manifestado Rodolfo Sancho. El actor, de 48 años, llegó el pasado domingo a Tailandia y visitó a su hijo en la prisión de miércoles a viernes en la isla de Samui, donde Daniel Sancho cumple prisión provisional desde el pasado 7 de agosto. Rodolfo Sancho, que viajó a acompañado del abogado español, Marcos García Montes, ha revelado que ha llegado a pasar hasta cinco horas con su hijo durante las visitas diarias organizadas por la embajada de España a la prisión.

Las visitas de familiares y amigos en la prisión de Samui son de unos 15 minutos, pero las de la embajada o abogados, como en este caso, pueden extenderse de manera ilimitada, dependiendo de las autoridades del centro penitenciario. Sancho ha revelado además que había podido pasar tiempo a solas con su hijo y con bastante intimidad.

"He tenido muchísima flexibilidad en ese sentido y (no he estado) nada vigilado. Han entendido que son conversaciones íntimas entre padre e hijo, también con los abogados, y han sido totalmente respetuosos", ha explicado.