La autoridad de Protección Civil de Islandia ha declarado el estado de emergencia tras una serie de terremotos que pueden presagiar una inminente erupción volcánica. La Oficina Meteorológica de Islandia ha informado de alrededor de mil nuevos terremotos en los dos últimos días cerca de la ciudad de Gindavík, en el suroeste de la isla, y aunque los temblores no superaron una magnitud de 3, el peligro de una erupción volcánica en los próximos días es cada vez mayor.

Los terremotos son pequeños, pero sí dejan rastro en las calles y casas islandesas, como la de una pareja que se quedó en shock ante uno de estos pequeños terremotos que les dejó una luz intermitente y en la que escucharon caer un mueble.

Además, las calles de Gindavík está destrozadas y llenas de agujeros por los terremotos, que están haciendo conducible las carreteras.