En el día 27 de la guerra en Ucrania, no son pocos los organismos y particulares que aseguran que a Putin no le está yendo tan bien como esperaba la invasión que puso en marcha hace casi un mes, lo que ha llevado al presidente ruso a reformular su estrategia para avanzar en su ofensiva con los ucranianos. Y sobre esta cuestión han hablado en Más Vale Tarde Juan Antonio Moliner, General de la División del Ejército del Aire, y el periodista Ramón Lobo, reconocido corresponsal de guerra.

¿Es posible una guerra urbana? ¿Cómo se afrontaría? Moliner responde: "Hay una forma de hacerla que respeta más los usos y reglas de la guerra, donde hay que combatir casa por casa, calle por calle, pero que exige un gran esfuerzo en víctimas propias y contrarias, y hay otra forma que consiste en aplanar las ciudades y rendirlas a base de destrucción sin ninguna consideración a la ley o al derecho internacional humanitario, porque las víctimas civiles se van a producir en gran cantidad".

Esta reflexión del general podría ser una de las opciones del ejército ruso. Esto es, tomar Kiev de esta manera: bombardearla, dejarla sin víveres ni agua, a base de agotar las infraestructuras y los civiles para que no presenten resistencia ninguna. "Si ese objetivo lo persigue de forma decidida rusia, sin duda", cree Moliner que podría pasar. Lo cierto es que esta guerra ya ha dejado bastantes bajas cuando no se han cumplido aún ni 30 días desde el inicio directo del conflicto.

Según la inteligencia estadounidense, hay 10.000 bajas en el ejército ruso. "Son más muertos que en las dos guerras de Chechenia, y más muertos que los de los americanos en la suma de la guerra de Irak y Afganistán, que fueron 7.000. Hablamos de muchos muertos", ha destacado Ramón Lobo, que ha llamado a tener en cuenta además que hay que sumar "unos 20.000 heridos". "Son muchos muertos, significa que hay mucha resistencia", ha advertido el periodista, que ha añadido: "No sabemos si van a hacer en Kiev lo mismo que Mariúpol o si van a respetar la capital".