El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ya ha empezado a poner en marcha la que será una de las estrategias clave en la posición de Rusia en la guerra en Ucrania: la celebración de referéndums en cuatro territorios ucranianos para que anexionarlos a su país. Un movimiento fundamental que analizamos en Más Vale Tarde con el experto José Ignacio Cembrero, que tiene clara una cuestión: "La guerra va a durar, y lo que hemos visto es que Putin está determinado a que la guerra continúe con todo el sufrimiento que supone".

Para Cembrero, Putin se encuentra ahora mismo ante un dilema crucial: "Aceptar la derrota -la política ya la tiene, la militar aún no- o apretar el botón nuclear". Una reflexión planteada "en un engranaje muy complicado" por la peligrosidad del contexto: [Putin] va a incorporar a la Federación Rusa en los próximos días a cuatro territorios mediante referéndums que son un engaño".

Esos territorios son Luhansk, Jersón y las regiones parcialmente controladas por Rusia de Zaporiyia y Donetsk: "A partir de ahí, cualquier ataque contra esos territorios va a ser considerado como un ataque contra Rusia. Putin se puede sentir legitimado para usar el arma nuclear táctica en defensa no de esos territorios, sino de Rusia", ha detallado el analista que da por hecho que no existe posibilidad alguna de que Putin acabe perdiendo esos referéndum.

Ello a pesar de lo que opine sobre el resultado de estas consultas la comunidad internacional. "Nadie fuera de Rusia, salvo quizá Bielorrusia, va a reconocer la validez de esos referéndum. Y sus 'amigos', como China, India o Kazajistán, tampoco van a reconocer su validez, como tampoco reconocieron en su día la anexión de Crimea", ha sentenciado Cembrero en Más Vale Tarde.