Miguel Ángel Revilla dejará de ser presidente de Cantabria a partir de este martes, cuando se haga oficial en el Boletín Oficial de Cantabria el nombramiento de María José Sáenz de Buruaga (PP) como nueva presidenta de la región. Fue el propio Revilla y el PRC quienes, con su abstención, permitieron que Vox no entrase en el Gobierno regional, una decisión que Revilla explica en Más Vale Tarde.

Revilla ve en Cantabria "un ejemplo a seguir", pidiendo al PP únicamente dos cosas: respetar las obras que ya están puestas en marcha y "reclamar a Madrid lo que no se está haciendo". "El PRC decía que si PP y Vox sacaban mayoría, nosotros intentaremos abstenernos para que no se contaminen con Vox, a quien consideramos un partido antiautonomista y con ideas retrógradas", opina Revilla.

Preguntado por si vería posible una unión entre PSOE y PP a nivel nacional para evitar la entrada de Vox en el Gobierno, Revilla cree que España "no está preparada" para esa situación. "Veo a PP y PSOE como cristianos y musulmanes, pero en algún momento tiene que llegar a España, como ha llegado a otros países europeos. Creo que todo lo que sea que no entre un partido como Vox en el Gobierno, sería importante la contribución de todos", considera.