Un joven de 15 años le ha clavado unas tijeras en la pierna a un compañero de instituto, de 13, en San Fernando, Cádiz. El agresor ha sido expulsado temporalmente del centro, si bien los padres de la víctima, que venían denunciando que su hijo sufría acoso escolar, han tomado la decisión de cambiarlo de instituto.

Más Vale Tarde analiza este caso con el psicólogo Javier Urra, que en el vídeo sobre estas líneas asegura que la petición de los padres de la víctima de que se imponga una orden de alejamiento al agresor "no es habitual, pero es posible". En este sentido explica que, en cuanto un chico tiene más de 14 años, entra en vigor la ley orgánica de responsabilidad penal del menor 5/2000, que contempla la libertad vigilada, que quiere decir que "sigues libre, pero te supervisamos".

Sin embargo, el ex defensor del menor de Madrid apunta que "el problema que tenemos es que al final es la víctima quien se tiene que ir, que el profesor lo más que puede echar a un chaval es unos días y que la inspección inicia un procedimiento, pero acaba pocas veces sancionando al agresor y llamando la atención a los padres, que muchas veces saben que su hijo es violento y no dicen nada".