Se podría llamar la huelga de los vasos, sería algo así como cuando los transportistas hicieron su parón en Navidad o cuando los controladores lo hacen en pleno mes de agosto. Porque si nada ocurre, el sector de la hostelería de Andalucía irá a la huelga en plenas vacaciones de verano.

Los sindicatos se quejan de la propuesta de la patronal, los nuevos contratos se firmarían por salario el mínimo interprofesional, 645 euros, las jornadas serían normalmente de entre 9 y 10 horas, se trabajarían festivos, no se descansaría en todo el verano y se perderían derechos como la incapacidad temporal.

Una de las provincias donde ya se han endurecido las condiciones laborales es Huelva. Allí, 12.000 personas se dedican a la hostelería, en los últimos años, han visto recortes de hasta el 60% de su salario. 

Una de ellas es Rocío, lleva 26 años como ayudante de cocina en este hotel y cobra 800 € al mes. No es una fortuna, pero son casi 150 más de lo que cobrarán sus nuevos compañeros de temporada, ella misma declara que le resultará complicado "trabajar al lado de otro que trabaja por 645€ mensuales".

Los convenios colectivos de la hostelería están bloqueados desde 2011 porque sindicatos y empresarios no llegan a un acuerdo. Los trabajadores cedieron cuando la cifra de clientes disminuyó con la crisis, pero ahora se quejan porque las previsiones turísticas son mucho mejores.