Polémica en torno a las "Normas de protocolo y actuación para las falleras mayores de Valencia y sus cortes de honor", que señalan cómo deben comportarse y vestirse las representantes oficiales de las Fallas en los actos públicos y privados, el rol de sus familias, el uso de redes sociales y sus obligaciones en los viajes oficiales.

La Junta Central Fallera (JCF) de Valencia ha manifestado en un comunicado su voluntad de "revisar" el documento que regula el funcionamiento de las Falleras Mayores y Cortes, por lo que ha decidido suspender los puntos referidos a la indumentaria de particular en los actos oficiales hasta la celebración el próximo martes 22 de noviembre de una asamblea, en la que se compondrá una comisión "para la redacción ágil de un nuevo documento que contará con la colaboración de los servicios de Igualdad del Ayuntamiento de Valencia".

Las opiniones de las falleras mayor y mayor infantil de Valencia, según contenía el documento, "podrán ser tenidas en cuenta por la Junta Directiva pero nunca serán preceptivas ni condicionarán su papel representativo durante el ejercicio" de sus cargos, vigentes desde el día en que el alcalde las telefonea para anunciar su designación (habitualmente en octubre) hasta justo un año después.

"Tanto ellas como sus familiares serán responsables de salvaguardar la imagen de la institución a la que representan y actuar con el decoro y la responsabilidad que la figura a la que representan merece", añade para señalar que sus cortes de honor (las doce chicas y niñas que no han logrado ser fallera mayor ni fallera mayor infantil) también deben comprometerse a representar sus "obligaciones" con "la mayor dignidad".

El protocolo de Junta Central Fallera, que preside el concejal de Compromís Pere Fuset, les instaba a asistir "siempre" a los actos programados y les prohíbe fumar en los actos oficiales, en los cuales no podrán usar móviles, cámaras fotográficas ni consolas. "En todo momento primará la agenda oficial sobre los actos particulares o familiares", proclama el documento, que prohíbe terminantemente a las falleras conceder entrevistas a cualquier medio de comunicación sin que hayan sido autorizadas previamente por la Junta Central Fallera.

Asimismo, remarcaba que sus derechos de imagen son "propiedad" de la JCF desde el momento de su elección y se les pide cautela a la hora de usar las redes sociales para aumentar "al máximo los niveles de privacidad". En cuanto a la indumentaria, se les conminaba a usar exclusivamente la de índole valenciana oficial que se les facilita al inicio de su cargo y añade: "En todos los actos donde se tenga que desfilar y/o subir a un escenario, no será conveniente utilizar prendas excesivamente cortas o llamativas.