Jose Antonio Primo de Rivera tiene 18 meses para abandonar Granada. En concreto en la plaza  de Bibataubín, en pleno centro de la ciudad. Lo dice la nueva ley de la Memoria Democrática Andaluza. Si un elemento exalta la dictadura debe desaparecer, al contrario que la Ley de Memoria Histórica Española.

El monolito dedicado al fundador de la Falange fue creado por un Premio Nacional de Escultura, y esta era la razón del alcalde para rechazar su traslado. Aunque este no es el sentir general. Cantaron para pedir una retirada que ahora han conseguido.

Y la oposición coincide con ellos. "Lo que tengo detrás mía no cumple ningún tipo de requisito artístico, ni tiene un valor patrimonial, ni suficientemente importante para mantener en el centro de la ciudad" dice Francisco Cuenca, portavoz del PSOE Granada. Aseguran que el alcalde tiene dos opciones, o quitar el monolito o mantener la estatua y poner en peligro las ayudas públicas. Porque una de las características de la nueva norma es justamente esta. Los municipios que no la cumplan no recibirán subvenciones y tendrán multas de hasta 2000 euros.

Aunque Granada no es la única ciudad española con resquicios del franquismo. En la Comunidad de Madrid encontramos ejemplos. Algunos partidos de la oposición en Boadilla del Monte hace tiempo que pelean porque estos nombres. También desaparezcan de su callejero. Y paseando por la Plaza Mayor de Brunete podemos ver  símbolos y textos. Placas, monolitos o monumentos que recuerdan una época pasada, que muchos quieren olvidar.