Gracias a la actuación de los vecinos, Pepi evita por quinta vez ser desahuciada con su hijas de su casa en Lavapiés, Madrid. Ha admitido que todavía tiene esperanza. "Miedo todavía queda, pero estoy más tranquila porque, de momento, se ha parado", ha dicho Pepi.
CON LA AYUDA DE SUS VECINOS