El desayuno es una comida fundamental, pero a menudo dudamos acerca de cómo lograr que sea nutritivo y completo. Ahora, un estudio apunta a que sería más saludable desayunar un trozo de pizza que los habituales cereales, pero, ¿es esto realmente así?

El nutricionista Luis Alberto Zamor matiza en Más Vale Comer esta afirmación: aunque, si comparamos calorías y cantidad de azúcar, tiene menos la pizza, la realidad es que ninguna de las dos opciones sería un desayuno correcto, ya que ambos son alimentos ultraprocesados.

Por ello, siempre será más saludable que la pizza sea casera, pero aún así "no todo vale": no es lo mismo comprar la masa ya hecha que hacerla en casa o usar tomate frito en vez de tomate natural. En este sentido, también conviene moderar la cantidad de queso empleada, utilizar la verdura como ingrediente estrella y por carnes magras.

En cualquier caso, este tradicional plato italiano no es un desayuno diario recomendable: un lácteo o una pieza proteica, fruta y cereales integrales son los ingredientes del desayuno correcto.

Por otra parte, Luis Alberto Zamora indica que debemos atender a ciertos elementos cuando, ocasionalmente, pidamos una pizza fuera de casa o a domicilio. ¿Qué pedir? Verdura, champiñones, anchoas, atún, aceitunas, pollo... En cambio, debemos controlarnos con los extra de queso, el maíz o el jamón york. En cuanto a los ingredientes que debemos evitar, el nutricionista cita algunos como las salsas, cremas, bacon, carne picada, o bordes rellenos.

Un truco para hacernos una idea de cuánta grasa contiene una pizza que hayamos pedido consiste en presionar ligeramente una hoja de papel de cocina sobre un trozo: según las manchas que absorba podremos estimar cuánta cantidad de grasa contiene.